viernes, 18 de abril de 2014

Yo quería ser la Magdalena...




Me gusta la Semana Santa, tiene ese algo místico que me atrae y yo que he pasado años cimentando mi Fe en base a la duda y búsqueda constante, hace que sea atractiva para mi.

Nunca he sabido por qué se llama "Semana Santa", si al final (ahora) se comienza a celebrar desde el Jueves, que parece no es tan importante, porque no alcanza a ser feriado (afortunadamente yo trabajo en las tardes, entonces para mi si es día libre, jojojo). Bueno, por la conversación que se da todos los años con mi madre, una señora ya un tanto mayor, me dice que cuando ella era niña, como era parte de una familia mitad evangélica, mitad católica, si comenzaba el lunes, todos con sus vestimentas grises, hablando en voz baja, rezando a cada momento, la verdad no me lo imagino, si era así a partir del lunes, qué hacia esta pobre gente el viernes, lloraban todo el día??? . 

Bueno, mi infancia también me dejó algunos recuerdos, por ejemplo las películas bíblicas, tan tradicionales como la historia de Santa Claus en diciembre, no había año en que no me tocara ver la historia de Noe, Abraham, ni hablar de la versión más clásica "Jesús de Nazareth", ese hombre era...o quizás sigue siendo la imagen de lo que yo tengo en mi cabecita como debió ser Jesús, a mi no me cabe que haya sido un hebreo normal, bajito, moreno, a mi me gusta ese con cara de estrella de cine...bueno, que quieren, si me educaron con esa imagen...

No recuerdo muy bien lo que mi familia hacia en estas fechas hasta antes de los 10 años, en ese momento decidí hacer mi primera comunión, creo que fue un acto de rebeldía y no de búsqueda espiritual, veía que mis padres no me estaban mostrando un camino muy claro en cuanto a la fe se trataba y decidí acudir a lo más cercano, desde ahí si tengo recuerdos de jueves visitado la capilla y quedando asombrada con el lavado de pies, ese es un acto de humildad máximo, claro, cuando entendí que las personas eran elegidas con pinzas y que no se trataban de desconocidos o de enemigos con quien estuvieran haciendo las pases y solo era un acto más bien simbólico, ya no me gustó tanto, me fui desilucionando, yo esperaba un poco más. El viernes, Vía Crucis y adoración a la cruz, eso a mi ya con el tiempo me chocó, no entendía como clavar un clavo (suena raro al escribirlo) en una cruz me iba a hacer mejor persona, y el Vía Crucis me provocaba una pena tremenda, pero no puedo negar que por mucho tiempo quise ser María Magdalena, me atraía ese personaje, la diferente, la que se entregaba por amor, no la Santa, encontraba tan fome ser Santa, en cambio ser ELLA, la que se enamoraba, la que con los años he descubierto que tuvo un papel más preponderante de lo que se nos ha contado, era ella la que me atraía, pero no, jamas fui la Magdalena, a lo más me tocó ser parte del grupo que acompañaba a las mujeres llorar. El sábado, todo muy silencioso hasta la medianoche en que nos juntábamos todos los niños con los adultos de mi capilla, hacíamos una gran fogata y esperábamos la resurrección del Cristo Redentor...era mágico, se me apretaba la guata, pensar en que todo era real, digamos que fui una niña muy impresionable. El domingo recibí huevitos por un par de años, pero insisto, lo recuerdo solo desde que comencé mi preparación para la primera comunión...

Como dije, mi Fe se ha cimentado en base a la duda, he buscado a Dios en mil formas, por lo tanto tuve mi etapa cercana a la Iglesia Evangélica, pero si soy mala Católica, menos puedo ser parte de una iglesia protestante, se imaginan, yo Testigo de Jehova o Bautista, si no soy capaz de ir una vez a la semana a misa, menos voy a estar en la calle predicando, después conocí a los amigos Adventistas, pero una vez fui parte de una expulsión pública de una mujer que había engañado a su esposo, me sentí tan gusana, ya que yo pensaba...y acaso la idea no es amar al prójimo...en fin, no pude ser parte de ninguna iglesia, entonces busqué en lo alternativo, después de haber tenido algunas clases en la universidad que me hablaban de civilizaciones matrísticas (no matriarcales que son otra cosa) me fui en la búsqueda de la Diosa...pero no me resultó, creo que la semilla machista de tener un Dios que gobierne nuestra vida es más fuerte, aunque no puedo negar que me encantaría que existiera un panteón con Diosas que se me aparecieran en sueños....

Con el tiempo comencé a experimentar un cuestionamiento entre lo que había aprendido en mis años de búsqueda espiritual y lo que yo era, si estudiaba un poquito la biblia me encontraba con tanto versículo que me condenaba por cada una de mis acciones que pensé...cómo puedo manifestar mi fe en un Dios que me condena por quien soy y en definitiva yo responsabilizo por haberme hecho así...yo estoy segura que vengo con falla de fábrica, si a mi me gustan las chicas desde niña, y decidí que no quiero creer en nada que me condene, simplemente me aferro con toda mi alma a la frase más bella de toda la biblia...AMA A TU PRÓJIMO COMO A TI MISMO, que sea el jefe el que me juzgue cuando sea el tiempo.

Bueno, hoy estoy en pleno Viernes Santo, escribiendo mi blog, escuchando Jesucristo Super Estrella, que me encanta, (herencia de mi padre, vieran como se emocionó cuando la pudo ver en colores),  y me acabo de acordar que hace dos años atrás, en la misma fecha me fui derechito al infierno, ya que la polola de turno, literalmente me raptó (busquen la definición, no es lo mismo que secuestro) y me encerró en un departamento con vista al mar, ese año si que deben haber marcado mi nombre en el libro de los condenados, pero la verdad la pasé tan bien que no me arrepiento ni medio segundo... fue lo más cercano que estuve de ser la Magdalena, esa es una historia que no les puedo contar con detalles porque me cierran este blog. 

Jesucristo Super Estrella:
https://www.youtube.com/watch?v=g0lx208q2sM

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